Yo, soy una de las que se salvó a tiempo de la "tripe A". Otros, no pudieron hacerlo. El horror sigue vivo, latente, lo que es peor actuando, sin nombre conocido, pero si con los mismos métodos.
La historia vuelve a repetirse, y otra vez el silencio.
No hablo del silencio de los gobernantes, hablo del nuestro. El silencio del ciudadano actual. Sospecho hasta una actitud similar a la de hace 35 años.
"Algo habran hecho", se decía.
Se decía hasta que llegaba el turno a un hijo, una hija, a una madre,un padre, al mejor amigo. Bién sabíamos que ellos no eran culpables. Fuimos despertando al horror, lo vivimos, lo palpamos, lo sufrimos. Lo seguimos sufriendo con los 30 mil desaparecidos.
Hoy se están juzgando a alguno de los integrantes de "la triple A", y a militares. No es gratis, para los querellantes. Aún sigue sin aparecer Julio López, primer desaparecido en demócracia. Recientemente fue secuestrado Puthod para intimidarlo. Vuelve a suceder nuevamente. Ahora es el turno de Carlos Petroni y su familia.
El querellante y víctima de la Triple A, Carlos Petroni, ha denunciado diversas amenazas en su contra por medio del correo electrónico y vía telefónica y, a pesar de estar incluido en el Programa de Protección a Testigos, no logró hasta el momento que se cumpla con una guardia mínima que proteja su vivienda. (seguir leyendo)www.casapueblos.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario