El ser humano no escarmienta....Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces sobre la misma piedra. Si efectivamente sólo tropezase dos veces, aún tendría disculpa.
Pero es capaz de tropezar una y mil veces sin inmutarse. Si contamos sus tropiezos por guerras, qué podría decirse de él. Pero a este “tropiezo” inextirpable de su condición, se añade la torpeza maliciosa de arrastrar tras él a muchos otros semejantes y a veces a las generaciones venideras… El mundo se nos puede estar viniendo encima, pero él no se corrige. Así pues, si las guerras son la primera prueba de su necedad, las centrales nucleares son la segunda aunque en estos momentos sea la primera. Y cuando digo necedad quiero decir en este caso absoluta falta de previsión. Pues resulta asombroso que un pueblo tan avanzado como el nipón, que habita un lugar del globo tan expuesto a los movimientos sísmicos, no haya previsto al construir sus centrales nucleares lo que podía ocurrir y ha sucedido…
Son demasiados descuidos, demasiados cálculos erróneos, demasiados desafíos a la Naturaleza, demasiada ceguera en los espíritus dirigentes como para fiarnos de lo que nos dicen los gobiernos, de lo que nos dicen los organismos internacionales, de lo que nos dicen los expertos. Incluso de lo que nos dice la ciencia. Ahí está en LCH, otra arriesgadísima aventura científica y un espantoso experimento cuyas consecuencias están por ver.
Dicho lo anterior, es sabido que la ventaja de las centrales es que ofrecen energía libre de carbono a precios razonables. Y a ella van hace mucho las naciones. No evalúan el peligro de la hecatombe no ceñida a zona concreta, sino extendida quién sabe si a un continente o al mundo entero. Y si lo evalúan les da igual. Ellos, al negocio…
La agencia intergubernamental Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) clasifica los accidentes nucleares con un criterio llamado “International Nuclear Event Scale” (INES), que va de 1 a 7.
Aquí tenemos los cinco accidentes más importantes:
1) Chernobyl. Unión Soviética, 26 abril 1986. Rating INES: 7.
2) Kyshtym. Unión Soviética, 29 septiembre 1957. Rating INES: 6.
3) Windscale. Gran Bretaña, 10 octubre 1957. Rating INES: 5.
4) Three Mile Island. Estados Unidos, 28 marzo 1979. Rating INES: 5.
5) Tokaimura. Japón, 30 septiembre 1999. Rating INES: 4.
6) Fukushima Japón, 11 Marzo 2011, seis reactores a punto de fusión. Rating INES ?
De acuerdo que cualquier método para obtener energía puede tener un costo en desastre. Pero no es lo mismo que un embalse rompa sus paredes con consecuencia catastróficas medidas en vida que el accidente por error humano, por causas naturales, o por el sabotaje de una central nuclear. Pues los efectos de un “accidente” en una central nuclear afectan a la vida en general y se extienden en el tiempo a las siguientes generaciones. Luego está la imposibilidad de deshacerse de los residuos nucleares. El uranio dura miles de años y el cesio trescientos… Y ya se tiene la experiencia del estallido de bidones conteniendo residuos en aguas de Somalía.
No creo que por lo sucedido en Japón cambien las cosas. Esa contumacia a que me refiero al principio y la tiranía de los precios en el capitalismo, que a menudo nada tiene que ver con el valor intrínseco del producto, hace temer que la energía atómica en manos del ser humano termine destruyendo el planeta sin pretenderlo. Y es que el humano, principalmente el que se mueve por motivos economicistas -termino como empecé-, por no desprenderse, preso de codicia, de los pesadísimos lingotes de oro que lleva consigo es capaz de dejarse hundir en el fondo del pantano y arrastrar con él al resto de la humanidad.
Pues otra prueba de la estupidez del humano es que todo lo calcula en pérdida y ganancia, pero en dinero. No tiene ni aplica otros baremos. Si en lugar de dinero fuese cada vida humana la medida del valor, a estas alturas es imposible que una sociedad situada en el nivel superior de inteligencia no abandonase inmediatamente las centrales nucleares, para no volver a tropezar en la misma piedra en la que ha tropezado ya varias veces. Kaosenlared
ML
¿Por qué los políticos se burlan de nosotros?
-
Espert, a Áxel: "Salí urgente de tu nube de gas comunista" ¿Usted cree
que Espert ignora las peculiaridades económicas y sociales que definen a
una so...
Hace 3 semanas
No hay comentarios:
Publicar un comentario