Según el informe, este fenómeno afecta aproximadamente a 600 familias y es conocido como “comunidades cautivas”. “Representa además una forma contemporánea de esclavitud que debe ser erradicada de manera inmediata”, señala la publicación.
Asimismo, en el informe se analiza la situación que enfrentan las comunidades cautivas para acceder a su territorio ancestral.
La Comisión reconoce los esfuerzos realizados por el Estado boliviano para hacer frente a esta grave situación; sin embargo, menciona que todavía existen comunidades cautivas, cuyos miembros se encuentran sometidos a realizar trabajos forzosos por deudas supuestamente contraídas.
Agrega que en estos casos, la mayoría de las veces, no reciben un salario por su trabajo.
De la misma manera la CIDH deplora la existencia de estas prácticas violatorias de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y otros instrumentos internacionales de los cuales Bolivia es parte. Asimismo, observa que la situación de servidumbre y trabajo forzoso en la que viven las comunidades cautivas es una manifestación extrema de la discriminación.
Finalmente, el informe brinda recomendaciones para colaborar con el Estado boliviano en sus esfuerzos para erradicar estas formas contemporáneas de esclavitud y para garantizar y proteger los derechos humanos del pueblo indígena guaraní.
Entre ellas se comprenden acciones para prevenir, investigar y sancionar las formas contemporáneas de la esclavitud; reconstituir el territorio del pueblo indígena guaraní; y garantizar el acceso a la justicia por parte de los pobladores originarios.
Asimismo, en el informe se analiza la situación que enfrentan las comunidades cautivas para acceder a su territorio ancestral.
La Comisión reconoce los esfuerzos realizados por el Estado boliviano para hacer frente a esta grave situación; sin embargo, menciona que todavía existen comunidades cautivas, cuyos miembros se encuentran sometidos a realizar trabajos forzosos por deudas supuestamente contraídas.
Agrega que en estos casos, la mayoría de las veces, no reciben un salario por su trabajo.
De la misma manera la CIDH deplora la existencia de estas prácticas violatorias de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y otros instrumentos internacionales de los cuales Bolivia es parte. Asimismo, observa que la situación de servidumbre y trabajo forzoso en la que viven las comunidades cautivas es una manifestación extrema de la discriminación.
Finalmente, el informe brinda recomendaciones para colaborar con el Estado boliviano en sus esfuerzos para erradicar estas formas contemporáneas de esclavitud y para garantizar y proteger los derechos humanos del pueblo indígena guaraní.
Entre ellas se comprenden acciones para prevenir, investigar y sancionar las formas contemporáneas de la esclavitud; reconstituir el territorio del pueblo indígena guaraní; y garantizar el acceso a la justicia por parte de los pobladores originarios.
COMUNIDADES CAUTIVAS: SITUACIÓN DEL PUEBLO INDÍGENA GUARANÍ Y FORMAS CONTEMPORÁNEAS DE ESCLAVITUD EN EL CHACO DE BOLIVIA
http://www.cidh.org/countryrep/ComunidadesCautivas/cautivasindice.sp.htm
No hay comentarios:
Publicar un comentario