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En Honduras como todavía las cosas son al revés, los muertos en vez de ir cielo, vienen del cielo. Y por ello uno puede preguntarse dónde o a quién le va a caer el muerto, mejor dicho, los muertos.
Así es, voy a referirme a la construcción, otra vez, de un aeropuerto decente para la capital de Honduras.
Pero antes, siempre en conexión con lo del aeropuerto y el reciente accidente fatal a pocos kilómetros de Toncontín, y una manera cavernícola de actuar catracha peligrosamente trasmitida desde las esferas del poder y/o de las sectas confabuladas en que el hondureño continúe sin alimentos, sin salud, sin educación, sin país.Durante las “deliberaciones’ del congreso de Honduras antes, durante y después del golpe de Estado, podría escucharte y verse claramente como los llamados padres y madres de la patria, abucheaban a aquellas personas con ideas con las que no comulgaban, esto le sucedió a Cesar Ham, Marvin Ponce, Edmundo Orellana y así también a unas beligerantes diputadas en contra del golpe. Créanme que era vergonzoso estar con gente de diferentes nacionalidades escuchando esos abucheos propios no de un zoológico común sino de un zoológico no amaestrado. No hace mucho, cuando se supo de la intentona de golpe al presidente constitucional del Ecuador, Rafael Correa, otra vez, pero en menor medida, ronroneó la fauna del congreso.
Si se trata de cambiar todo ese atraso que le han dado al pueblo la mayoría de políticos/as que en realidad nunca han estado preocupados por Honduras sino por sus bolsillos, no debe hacerse imitándoles, copiándoles sino extirpando de raíz ese comportamiento salvaje y pensamiento inhumano. Es la razón por la que me uno a compatriotas que no han visto con buenos ojos que en el velorio del líder sindical Israel Salinas, se abucheara al presidente Pepe Lobo, quien llegó a darle el ultimo adiós a quien aseguran fue su amigo de muchos años.
No había que hacerlo --porque solo contribuye a que los enemigos del pueblo hondureño aprovechen este tipo de cosas para despotricar contra la Resistencia—sino por Pepe pues por lo menos por respeto al muerto. En el programa Resistencia del martes, el mismo periodista Felix Antonio Molina dijo:
“En realidad que duele que le hagan eso a cualquier persona”. Es una buena reflexión en donde quizá inconscientemente el periodista reconoce que no es un acto que debe celebrársele a nadie: Ni a los abucheadores del congreso, mucho menos a los de la Resistencia, que representa la búsqueda de una nueva Honduras.
Sabemos que no es toda la Resistencia, pero sí hay quienes incentivan este tipo de acciones, como un tipo de allí de una radio de San Pedro Sula, que de forma vulgar, procaz y cobarde, denigra, calumnia sin prueba alguna (hasta personas que, a Dios gracias, nunca nos hemos visto con él) a cualquiera que no piense como él que se las lleva de comunista a punto de enmontañarse (pero solo de boca, porque lo asusta hasta su propia sombra). Lo lamentable de esto es que él tiene en su nómina y se respalda a cada rato con su nombre, al colega escritor Julio Escoto. Es una pena que Escoto avale este individuo soez e irresponsable, quien transmite esa duda de si Julio Escoto ayuda económicamente a este individuo para que lo adule a él y nos denigre a otros. Conociendo a Julio no creo que él apoye al energúmeno con ese propósito, quizá hasta desconoce que este tipo es promotor del odio, del irrespeto y que algunos autodenominados Resistencia actúen dejando mucho que desear.
Yo, afortunadamente, no es que lo escuche, pero me lo reportan continuamente gente de la Resistencia, incluyendo algunos/as que han salido como delegados e incluso me aconsejan que lo demande, pero, en Honduras todos nos conocemos, no valdría la pena gastar tiempo y dinero demandándolo porque tanto él como la radio subsisten gracias a la caridad publica. Julio, como compatriota y colega, te pido, por favor, no seguir subsidiando a este individuo que no hace sino transmitir su enfermedad a aquellas personas que inocentemente le escuchan, y, de paso, ensucia tu nombre.
Ayer escuché a mi amigo y coterráneo Rasel Tomé, en el excelente programa Noticomentarios de la tarde, de Francisco Hernández Umanzor, y estamos de acuerdo con él, tanto con el castigo a los criminales, no a la impunidad, y el regreso pronto y seguro del presidente Zelaya. Eso sí, no debemos de justificar hechos como el suscitado en el velorio de Israel Salinas. En Olanchito, Rasel, nos enseñaron que los velorios se respetan y cualquier diferendo se resuelve lejos de donde está el difunto. Y si otros son asesinados, nosotros no; si son ladrones, nosotros no; si la pobreza de lenguaje y razon solo lo pueden expresar a traves de los sonidos guturales como el abucheo, nosotros no.
Y siguiendo con el aeropuerto, la razón asiste una vez más al presidente Zelaya y a quienes le apoyamos en la construcción de un nuevo aeropuerto en Palmerola, sin duda que los muertos de estos accidentes deben caer en la conciencia, si es que la tienen, en aquellos que por intereses políticos y personales, porque ya estaba la campaña de que toda propuesta que viniera de la administración Zelaya, era errónea, mala, equivocada, no importándoles los muertos del futuro. Y estamos en el futuro.
Consulté a un asiduo lector, piloto retirado (quien pidió omitiera su nombre), pero con la experiencia requerida para que sea quien mejor nos hable del tema, y aquí les comparto su opinión:
“Respecto a lo del aeropuerto, para mí sería un sueño hecho realidad pasar Toncontín a Palmerola.
Operaríamos de manera más segura y vendrían más personas de negocios a la capital, por lo consiguiente llegarían aviones de mayor tamaño, en fin tantas ventajas a favor.
Hace algún tiempo miraba un plano aéreo del centro del país, y me causaba risa, por no decir cólera, saber que la carretera del norte pasa por Zambrano solo porque ahí estaba la finca de Carías Andino, por eso para llegar a Comayagua la distancia aumenta mas de 25 kilómetros, si esta se trazara por el cañón que hay después de Amarateca, nos ahorraríamos mucha distancia. Tendríamos tan cerca de la ciudad un aeropuerto con todas las condiciones para competir y no pasar estas desgracias como la sucedida el lunes, mira que casi siempre que hay mal tiempo, sucede una desgracia porque el aeropuerto de por sí es limitado, imagínate con condiciones atmosféricas en contra.
Tenemos tan cerca ejemplos de como algunos vecinos sacaron sus aeropuertos a aéreas fuera de la ciudad: El Salvador que tiene su aeropuerto en el departamento de La Paz, Costa Rica en Alajuela, porque no copiar lo bueno, es increíble que ellos tengan tanta actividad aérea y nosotros no pasamos de lo mismo.
Escuché ayer al presidente del congreso hablar de sacarlo de la ciudad... Qué cosas verdad! Lo que Mel decía hace casi 3 años y que algunos políticos gritaron a los cuatro vientos como algo malo, hoy es bueno, como cambiamos los seres ''humanos''.”
Bueno, ya habló uno que sí sabe… ¿Qué podríamos agregar?
Nueva York NY 17 febrero 2011-02-16
robertoquesada@hotmail.com
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