Periodistas y camarógrafos de Canal 36 CHOLUSATSUR y Hable Como Habla, resultan gravemente heridos
Tegucigalpa, Honduras. La oligarquía dictatorial que desgobierna Honduras bajo el papel sucio de una democracia electoral, dio un zarpazo más a la patria al reanudar la brutal represión que por segunda semana consecutiva agrede a un pueblo que se moviliza en paz, pero con decisión y energía.
La misma suerte corrieron periodistas y reporteros gráficos de Canal 36 y de Hable Como Habla, que fueron heridos de gravedad e intoxicados con gas lacrimógeno cuando cubrían la represión policíaco-militar en la sede del Colegio de Profesores de Educación Media de Honduras (COPEMH).
Hoy por la mañana unas 500 personas refugiadas en el COPEMH, fueron rodeadas por un batallón militar y decenas de policías fuertemente armados, que indiscriminadamente lanzaron centenares de bombas lacrimógenas contra los docentes, mientras permanecían en un local cerrado.
Muchos docentes fueron afectados y el periodista Richard Casula y el camarógrafo, Saúl Sandoval, de Canal 36 Cholusat Sur y otro del canal Hable Como Habla que cubrían desde el interior del COPEMH, fueron impactados en el rostro con bombas lacrimógenas.
Los tres comunicadores resultaron gravemente heridos y fueron trasladados a la sala de emergencia del Hospital Escuela, de la capital. En tanto, a las 10:20 am la señal de Radio Globo salió abruptamente del aire, solo se accedía a través de Internet y unos 40 minutos después volvió al aire, explicando su propietario, Alejandro Villatoro, que se trató de un bajen en el fluido eléctrico.
El edificio del COPEMH se convirtió en una cámara de gas, hay unas 30 personas detenidas y persecución contra profesores en colonias aledañas. Incluso, gente que transitaba el lugar a bordo de taxis, eran bajadas por policías de las unidades y remitidas a resguardo policial.
Desde la sala de emergencia del Hospital Escuela, Radio Globo reportó que el camarógrafo Sandoval, expresó que “vi que un Policía de uniforme azul me disparó directamente a la cara porque estaban golpeando a otros camarógrafos.
En tanto, miles y miles de padres de familia, estudiantes, pobladores y miembros del Frente Nacional de Resistencia Popular (FNRP), se sumaron a las movilizaciones y plantones en apoyo al magisterio, denunciando, además, que fueron intensamente gaseados por la policía.
Otro escenario se presenta en las mazmorras de la policía, donde al menos 30 profesores permanecían detenidos en la posta policial de barrio Los Dolores, o Comando Regional 7 (CORE-7), para exigir la liberación de los detenidos, que según denuncias en medios radiales, fueron torturados y se les impidió dormir en paz ya que el suelo de la celda fue anegado con agua.
Hasta ese lugar llegaron miles de padres de familia, vendedores de los mercados y profesores de diferentes colegios profesionales, agrupados en la Federación de Organizaciones Magisteriales de Honduras (FOMH)
El paisaje de Tegucigalpa es desolador, luce el panorama de una ciudad ocupada, de una ciudad rodeada por símbolos de invierno, al decir de Silvio Rodríguez; una ciudad militarizada pero llena de personas humildes, valientes y luchadores.
Como telón de fondo, sobre el pueblo se cierne una prensa tradicional tramposa y acomodada, tan acomodada que le hace los mandados a la oligarquía en mejor forma que los mismos oligarcas pueden aspirar, empujando una campaña de odio y división contra los sectores populares que se alzan contra un estado de cosas desquiciado e insostenible.
*Carlos Zelaya Herrera
Periodista
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