El presidente de Uruguay, José Mujica, negó que hubiera hablado por teléfono con Cristina Kirchner para acordar una reunión después de que el G-20 incluyera a su país en la lista de paraísos fiscales internacionales, lo que le podría costar sanciones. También su esposa, la senadora Lucía Topolansky, desmintió que se hubieran producido contactos durante el fin de semana, como se rumoreó. No obstante, trascendió que podría producirse un encuentro el próximo fin de semana cuando Mujica viaje a la Argentina para recibir una distinción académica. En la conferencia final del G-20, en Cannes, el presidente francés Nicolas Sarkozy incluyó a Uruguay en su enumeración de paraísos fiscales que pueden llegar a ser “apartados de la comunidad internacional”. En una entrevista publicada ayer por el diario uruguayo
La República, Mujica habló sobre su “pleno convencimiento” de que la Presidenta argentina “no tuvo nada que ver” con la acusación. Sin embargo, la oposición uruguaya salió a criticar a los gobiernos argentino y brasileño por no haber rechazado, como miembros del G-20, las afirmaciones de Sarkozy.
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