RIO NEGRO ANTE RETO DE MORTALIDAD INFANTIL
Alta tasa. Embarazos adolescentes y baja densidad de población contribuyen al fenómeno
Al comparar las tasas de mortalidad infantil por departamento, se ve que unos pocos superan la media nacional de 7,7‰. Uno de ellos es Río Negro, que se despega con 12‰. Dos razones lo explican: menos nacimientos y más embarazos adolescentes.
La hipótesis de que el sistema de salud podía estar fallando en la atención a los recién nacidos fue descartada de plano por todos los consultados por El País "No hay ninguna falla en el sistema pediátrico´, afirmó tajante Alfredo Orellano, director departamental de Salud de Río Negro, delegado del Ministerio de Salud Pública.
Si bien los 12 fallecimientos cada mil niños menores de un año nacidos vivos en 2010 "preocupa" en la oficina departamental, las explicaciones a esa cifra abultada sobre la que nadie quiere causar alarma vienen dadas, más bien, por cuestiones sociales y demográficas.
El aumento "se explica por el número de habitantes que tiene el departamento", dijo sin vacilar Orellano. El consenso es que tratándose de un departamento con pocos habitantes y pocos nacimientos, la muerte de un solo niño hace fluctuar la Tasa de Mortalidad Infantil (TMI) porque el total sobre el que se hace el cálculo es bajo.
De hecho en los últimos años la TMI, que mide la cantidad de fallecimientos cada 1.000 niños menores de un año nacidos vivos, varió sustancialmente en Río Negro.
En 2008 era uno de los departamentos con menos mortalidad: 5 por mil. De acuerdo al censo de 2004, en el departamento viven unas 54.000 personas, que en términos generales se distribuyen en dos mitades que son Fray Bentos y Young. La densidad de población, una de las más bajas del país, es 5,82 habitantes por kilómetro cuadrado.
A ese problema demográfico estructural se agrega una importante disminución de los nacimientos de un año y medio a esta parte. En 2010 hubo 903 nacimientos cuando en 2008 fueron 996. La diferencia de casi 100 niños menos "se nota", dijo a El País el pediatra y neonatólogo César Espino, que se desempeña en la salud pública y privada de Fray Bentos.
Otro elemento que incide en el aumento de la mortalidad infantil en Río Negro, según Espino, es un aumento en el número de madres adolescentes. Si bien no pudo aportar cifras al respecto, el pediatra indicó que los embarazos adolescentes "por lo general terminan siendo los pretérminos más graves".
Explicó que en un niño nacido con 26 semanas o poco más -cuando lo deseable es que alcance las 40-, el riesgo de animación es muy grave. Destacó que varios de los pequeños que él recuerda eran prematuros, hijos de madres adolescentes, y murieron en un CTI por causas respiratorias o infecciosas. Y reconoció: "Nos cuesta bastante llegar a los adolescentes".
Por otro lado, en Río Negro no hay CTI, ni público ni privado. El más cercano está en Mercedes, a unos 30 kilómetros, y no siempre hay camas disponibles para la internación.
Aunque desde la dirección departamental no aportaron las cifras absolutas de los fallecimientos en 2010, los médicos consultados coincidieron en destacar que hubo varios casos de bebés prematuros. Lila Tiscornia, exdirectora del hospital de Fray Bentos, recordó que el año pasado se registraron cinco muertes por malformaciones y dos por accidentes de bebés que murieron por asfixia en la cama de sus padres.
"No hemos constatado muerte por desnutrición, pero en familias numerosas duermen juntos en la misma cama ha ocurrido algún caso de muerte de bebé por asfixia"
BOTNIA Con UPM (ex Botnia) haciendo crecer los números de la industria nacional por la exportación anual de más de un millón de toneladas de celulosa y el "boom" agropecuario con su epicentro en Young, Río Negro es uno de los departamentos que más aporta al Producto Bruto Interno. Pero el volumen de miles de millones de dólares producidos en estas tierras no ha logrado aterrizarse desde el punto de vista social.
Cuando terminó la construcción de Botnia, Río Negro volvió a ocupar el primer lugar en materia de desempleo, igual que ocurría antes de que llegara la inversión finlandesa. Y esto, de acuerdo a la visión de Espino, incidió en la baja de natalidad. El profesional visualiza que después del auge de Botnia, "la situación cambió: los nacimientos se ven más en familias carenciadas y adolescentes, y no tanto en familias en edad reproductiva adecuada".
."Altísima" tasa entre 1990 y 1995 Espino, pediatra neonatólogo de Fray Bentos, recuerda que entre 1990 y 1995 la Tasa de Mortalidad Infantil (TMI) en Río Negro era "altísima". Entonces se definió que todos los partos fueran asistidos por pediatras, y eso contribuyó a disminuir la TMI.
César
Los médicos consultados coincidieron en señalar que el Plan Aduana, que vigila el buen desarrollo de los lactantes, "funciona bien" en Río Negro. Fray Bentos tiene uno de los primeros centros de salud creados en Uruguay para el cuidado de las madres y recién nacidos. Desde allí se hace un seguimiento de los más niños más carenciados con visitas domiciliarias, así como a aquellos que en los primeros 10 días no consultaron al médico.
La coordinadora departamental del Ministerio de Desarrollo Social, Marilyn Mazantti, dijo que "no hay casos de críticos de desnutrición"
Mazantti explicó que hay "una red de control y protección social" con la tarjeta alimentaria y el Plan de Equidad "La necesidad de alimentos es cubierta por el INDA, que también da canastas por desnutrición a quien presente los certificados correspondientes", aseguró
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