Uruguay: LA ENCRUCIJADA DEL BANDES

En la cruz de los caminos, para el sistema finaciero,

para el Bandes y para el gremio bancario.

Al compañero, al camarada, al amigo, al hermano, Gustavo Pérez.-

Hay momentos en la vida en que es necesario reflexionar más que en otros.

Este es uno de ellos. No alcanza con entender el funcionamiento que hoy tienen las empresas del sistema financiero. Ni siquiera alcanza un buen plan de negocios.
Es necesario abordar el contexto político en el cual se desarrollan los acontecimientos.

El gobierno comienza a estar más preocupado por una crisis global, de la que se decía ya había pasado. Por eso el artículo 4to. en la ley de presupuesto que no es ni más ni menos que tener presente como variable de ajuste los salarios y las jubilaciones, algo de eso saben los europeos.

Cuando Venezuela se hizo cargo del Bandes, todos pensamos, la derecha también, que el propósito era establecerse en una plaza seria desde la cual operar para la zona.-

Era una acción política, no una ayuda benemérita hacia el Uruguay. Debía estar acompañada de un plan empresarial viable, pero sobretodo de una proyección política hacia la zona. Era una oportunidad para el gobierno, oportunidad complicada desde el punto de vista político por lo que ello implicaba.

Pero nada se hizo, al menos que lo conozcamos, responsabilidad o irresponsabilidad de los administradores venezolanos, dejar hacer del gobierno frente a los problemas que el tema planteaba, y una espera cruel para los trabajadores.-

Solo el gremio bancario podía ante la población hablar claro, pero ya no estaba el Juanjo. ¡Que difícil es hablar políticamente cuando faltan referentes!

El gremio se ha debatido entre el apoyo al gobierno de los sectores mayoritarios y la crítica irresponsable de los menos. No ha definido una política que como parte de los trabajadores del país tuvieran como norte el fin de la explotación de los seres humanos en el desarrollo de la producción.-

Marcamos una diferencia desde los jubilados de AEBU, salimos mientras pudimos, a defender las jubilaciones bancarias, no en el marco economicista, sino denunciando el origen de la crisis de la seguridad social, denunciando un sistema impositivo degradante basado en el IVA, y en los impuestos al trabajo, en un sistema empresarial privado que en muchos casos para subsistir tiene necesidad de varias contabilidades simultaneas.

Nuestros compañeros lo entendieron y dieron batalla, ubicados además en la compresión de que Uruguay solo no puede modificar lineamientos, que debe moverse dentro de ellos.-

Nuestro rol como sindicato debe ir más allá, ¿que nos impide hoy hablar de la necesidad de una moneda única universal?, ¿de la necesidad de llegar acuerdos globales que transformen el sistema impositivo corrupto actual en un sistema basado en la circulación del dinero?, tener como objetivo la muerte de los paraísos fiscales.

Se hacen cientos, miles, de reuniones internacionales, se intercambian experiencias, pero los compromisos burocráticos atan el programa a meras reivindicaciones puntuales, y no al fondo del asunto.

Tiene que dolernos que formidables expresiones del proletariado francés tenga solo como programa
 los años para tener derechos jubilatorios.-

Tenemos que plantarnos ante una crisis global que avanza, que ahora nadie puede ignorar, y de la que no se sale como se entró.- La humanidad necesita reformas para iniciar una revolución en el modo de producción, nunca antes en la historia la disyuntiva de socialismo o barbarie fue tan clara, como dice Fidel, el uso de armas nucleares sería el fin.

Si reflexionamos podemos comprender como en la historia los que lucharon por el fin de la explotación del ser humano por otro, siempre fueron derrotados, desde Cristo, hasta Marx y Lenin, pasando por Artigas. Nos ha tocado a nosotros en medio de la más grande crisis empezar a vivir tiempos de cosecha.

Para ello es necesario elevar la moral a través del programa.

Jorge Aniceto Molinari
4 de noviembre de 2010.-
http://www.cajaencrisis.blogspot.com/