A poco más de dos semanas de ocurrido el ataque israelí a la Flotilla de la Libertad donde murieron según cifras oficiales nueve activistas, mientras que otros 30 resultaron heridos, el Gobierno de Israel advirtió que no ha cambiado su política y que está alerta para frenar la llegada de nuevas flotillas que intenten llevar ayuda al pueblo de Gaza.
"El Gobierno no ha cambiado su política (...) Todas las agencias y ministerios están en alerta y siguen de cerca los acontecimientos" para frenar la llegada de nuevas naves, señaló el portavoz del Ministerio de Exteriores israelí, Andy David.
El envío de nuevas embarcaciones a la Franja de Gaza irá de la mano de Irán, país que ha anunciado que mandará dos barcos cargados con ayuda humanitaria recogida por la Media Luna Roja (movimiento internacional de la Cruz Roja en la República islámica).
La primera nave iraní partió este lunes y se prevé que la segunda embarcación podría emprender viaje para este fin de semana.
Asimismo, el Líbano ha anunciado también el envío de una nave, fletada por el Movimiento Gaza Libre y la organización Reporteros sin Fronteras, que podría partir esta misma semana para Gaza, ciudad que vive desde hace tres años un fuerte bloqueo económico impuesto por Israel y Egipto, que ha generado una fuerte crisis a los palestinos.
El movimiento islamista chií libanés Hizbulá también está organizando una flotilla con el apoyo de Siria, según informó un diario israelí.
Bajo este sentido de enviar nuevas naves a Gaza para romper con el cerco económico que mantiene Israel en el pueblo palestino, el portavoz israelí de Exteriores dijo que "el hecho de que haya flotillas enviadas por Hizbulá e Irán demuestra que se trata de provocaciones terroristas, de un esfuerzo coordinado de las organizaciones yihadistas y no de iniciativas humanitarias".
"Es lamentable que haya pacifistas genuinos" que están siendo engañados por las "organizaciones radicales" que impulsan las flotillas, agregó David.
Para el próximo 12 de septiembre el movimiento Viva Palestina (con sedes en Reino Unido, Turquía, Estados Unidos, Malasia y Líbano) y el Comité Internacional para Romper el Bloqueo a Gaza, ha anunciado la salida para la fecha antes mencionada de un convoy terrestre y uno marítimo para enviar ayuda a los palestinos.
El cargamento por tierra partirá de Londres y atravesará Europa, Turquía y Siria recogiendo a su paso coches, camiones y voluntarios con el objetivo de llegar a los 500 vehículos, que tratarán de entrar a Gaza por Rafah, en la frontera con Egipto.
Por su parte, el convoy marítimo pretende alcanzar las sesenta embarcaciones, que unirán a la flotilla inicial durante sus paradas en varios puertos del Mediterráneo.
Con intenciones de ayudar a Gaza, Alemania dice presente también, por lo que la organización Judische Stimme (Voz Judía) ha anunciado el envío de un barco con pasajeros israelíes con ayuda escolar e instrumentos musicales para los niños palestinos.
Israel ha pedido a los países de la Unión Europea (UE) que impidan la salida desde sus puertos a los barcos que buscan ayudar al pueblo de Gaza y así romper el bloqueo económico de Israel, que tiene como fin asfixiar al movimiento islamista Hamás.
En la madrugada del pasado 31 de mayo, fuerzas israelíes asaltaron la Flotilla de la Libertad que llevaba alimentos, enseres, ayudas médicas y materiales para la construcción de Gaza, puesto que estructuras como hospitales y escuelas han quedado derribadas o en muy mal estado tras los ataques de 2008 y 2009 a través de la operación Plomo Fundido.
En esta operación la fuerzas de Israel dejaron a más de mil 400 palestinos muertos y cinco mil heridos, en su mayoría civiles, además de millares de viviendas y edificios públicos destruidos.
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