La Paz, 16 de Agosto de 2011
Señor
Evo Morales Ayma
Señor Presidente:
Hace 21 años, los pueblos indígenas del Beni, despertaron al país con la histórica Marcha "Por el Territorio y la Dignidad" develando una realidad sobre la existencia de una Bolivia Pluricultural, que hasta ese entonces era negada por un Estado colonial cuyos representantes buscaban someter el grito de los excluidos que dieron inicio a una nueva época para las luchas indígenas en Bolivia.
Posteriormente, estos pueblos nuevamente, dieron una lección cuándo se enfrentaron a los patrones en el oriente, para ser parte fundadora del Pacto de Unidad de los pueblos indígenas de oriente y occidente, sellando la unión que permitió las base social en las cuál se erigió el nuevo proceso de cambio que vive el país y para ello enfrentaron también los intereses de los poderosos que consideraban que el Estado no podía ser de los indios.
Estos pueblos acompañaron lealmente el proceso de cambios, sufriendo todo tipo de atropellos, vejámenes y humillaciones perpetrados por los unionistas, Comités Cívicos y Gobernaciones y a pesar de la brutalidad con la que quisieron someterlos, primó su compromiso con sus pueblos y la sangre indígena que los mantuvo consecuentes como constructores de la nueva Bolivia, aportando en la Asamblea Constituyente y dando nacimiento al nuevo Estado Plurinacional que hoy nos enorgullece a todos y todas. Los representantes de estos pueblos, son los mismos que no obstante estar contra sus intereses terminaron aceptando incluso que tuvieran un menor número de representantes en la Asamblea Plurinacional, todo por preservar la unidad frente a la reacción de la derecha que ponía en peligro la aprobación de la nueva Constitución.
Y hoy son los mismos pueblos indígenas, quienes se han visto invadidos en sus territorios con maquinarias para abrir un camino por el mismo corazón del Territorio Indígena del Parque Nacional Isiboro Secure TIPNIS y por esto, se ha iniciado una nueva Marcha Indígena “Por el Territorio y la Dignidad II ”, esta vez, porque su búsqueda milenaria de la “Loma Santa” o la “Tierra sin Mal” ya había sido conquistada con el reconocimiento en la nueva Constitución del Estado plurinacional del dominio ancestral de estos pueblos sobre sus territorios, garantizándoles su libre determinación, el respeto a sus autonomías, sus autogobiernos, su cultura, el reconocimiento de sus instituciones y a la consolidación de sus entidades territoriales, postulados que hoy pueden ser vulnerados con la decisión unilateral sobre esta carretera
Hoy esos mismos pueblos indígenas se enfrentan ante un enfoque de desarrollo desde la lógica liberal y no así desde el enfoque de desarrollo alternativo que nos plantea el “vivir bien”, ya que la carretera amenaza a ecosistemas únicos en el mundo, pone en riesgo la sobrevivencia de la biodiversidad y de los recursos genéticos valiosísimos para Bolivia y todo el planeta. También la carretera posibilita el avasallamiento de terceros en sus territorios, los mismos que durante años saquearon los bosques y promovieron la tala irracional de maderas preciosas.
Sabemos también que es necesaria la urgente integración del Departamento del Beni, departamento aislado de los otros, con las subsiguientes consecuencias políticas y económicas para esta región y que una carretera permitiría mas salud, mayor educación, mejores servicios básicos y comunicación, pero todo esto debe ir en concordancia con lo que pregona “El Vivir Bien” y no con el interés de lógicas heredadas del Estado colonial, republicano y neoliberal que dejamos atrás, porque nos planteamos el reto histórico de construir el Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional comunitario que como dice en la nueva Constitución nos promete una Bolivia que respeta la libre determinación de los pueblos.
Señor Presidente, creemos que Ud. líder de este proceso de cambios y de la lucha por los derechos de la Madre Tierra sabrá escuchar la voz de estos pueblos, viabilizando un dialogo respetuoso, fraterno y sin imposiciones, que de paso a un encuentro entre los pueblos indígenas del Beni con los intereses estratégicos de la política nacional. Estamos seguros que es posible la construcción de la carretera sin que cruce necesariamente el TIPNIS, demostrando al mundo entero que Bolivia es capaz de promover el desarrollo en el marco de un enfoque respetuoso de la naturaleza y la madre tierra, que Bolivia respeta los Convenios Internacionales de Derechos Humanos relativos a los derechos de los pueblos indígenas como una nueva forma de hacer política generando el respeto y admiración en el mundo entero.
La APDHLP hace votos para un encuentro entre pueblos indígenas y gobierno y pone a disposición sus buenos oficios para coadyuvar a la solución de este conflicto, no dudamos que primará la sabiduría indígena sobre la lógica depredadora de los enemigos de siempre
Con este particular, reciba Ud. nuestros saludos de distinción
Teresa Subieta
PRESIDENTA
APDHLP
Sonia Brito
VICEPRESIDENTA
APDHLP
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