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El discurso también es único “este gobierno no dialoga bajo presiones ni amenazas” , dicen a una sola voz los distintos gobernadores, mientras el pueblo les exige acciones concretas denunciando a los empresarios matones que les quitan las tierras, que violan medidas cautelares y acuerdos internacionales que la nación ha suscrito.
Si los mansos se rebelan es porque la situación es grave, las rutas son testigos silenciosas de reclamos históricos en diferentes zonas del norte de la Argentina, un reclamo justo que pretendía evitar finales trágicos.
SANGRE QOM Y UNA FLECHA JUSTICIERA
Los hermanos Qom (que el invasor bautizo como Tobas) son de Formosa y estaban hace cuatro meses en la ruta 86 para evitar la construcción de una universidad agropecuaria en sus territorios ancestrales.
Para aclarar la situación vivida por el pueblo Qom, visitamos su blog (www.laprimavera.blogspot.com), ahí señalan que su lucha comienza el año 2004. En esa ocasión, surgió como dirigente Luis Medina tras haber demostrado honestidad en la toma de la escuela N° 308 junto a los padres de los niños. Exigían la construcción de baños para los alumnos y la renuncia de la directora. Legitimado por la comunidad, Medina asume como líder en un corte de la ruta 86 en febrero de 2005 “Esto será hasta las últimas consecuencias hasta que encontremos respuesta a nuestras demandas” (diario La Mañana miércoles 15 de febrero 2005, pág. 21) decía, airoso, el dirigente.
Después de toda esa convicción, Medina se pasó al lado contrario cuando el gobierno de Girlo Insfran (quien le diera refugio al dictador Alfredo Stronger del cual fue un fiel amigo) lo puso al frente de un trabajo en el centro integral comunitario, en el mismo medio de comunicación que antes publicaba sus airados discursos donde reclamaba justicia para su pueblo, hoy dice que las tierras reclamadas por la comunidad “La Primavera” no les pertenece a la comunidad.
También fue dirigente Qom Ceferino Fernández, en su historial se destaca como agente “Normalizador” en abril del 2008. Desde ese cargo fijó fecha para el 18 de junio de 2008 para desarrollar las elecciones internas en la comunidad Qom. Se convocaron veedores de Buenos Aires para garantizar la transparencia del acto. La ilusión del pueblo originario respecto a Ceferino se rompe cuando éste, el día de la elección pide a la Dirección de Personas Jurídicas de la provincia que se anulara la elección donde se elegía a Félix Díaz y legitima otro evento paralelo donde se elegía a Cristino Sanabria como presidente. Esa jugada le permitió crear una organización funcional al Gobierno de Formosa.
El tercer coaptado por Girlo Insfran es Eliseo Camachi, congresal del partido peronista y fiel puntero político del gobernador. Tanto Cristino como Eliseo fueron elegidos por la provincia como administradores de la comunidad.
Respecto a la situación de los tres dirigentes traidores, los miembros de “La Primavera” dicen “se demuestra en documento de la Dirección de Personería Jurídica que el hermano Eliseo forma parte de la comisión de la asociación civil como segundo vocal suplente. Ninguno de los cuatro, tiene la culpa. Por el contrario, son manejados cruelmente por el Gobierno. Les mienten, los engañan, los hacen trabajar para ellos y ni siquiera los recompensan por tanto esfuerzo”, puntualizan.
Así se demuestra que el principal armador de la tragedia en la comunidad “La Primavera” es el Gobierno cómplice de Formosa que el 23 de noviembre le quitó la vida a dos integrantes del pueblo Qom Roberto López y a un policía pagado para reprimir. Además Félix Díaz, el único dirigente legitimado por la comunidad, decidió la clandestinidad antes que presentarse a un tribunal a exigir justicia por su pueblo.
LIBERADOS POR EL PUEBLO EN EL CHACO
En tanto la provincia del Chaco dirigido por el gobernador Jorge Capitanich, pasa a formar parte del expediente cuando su sistema jurídico encarcela a los hermanos Sixto y Alcides Berdún de Pampa del Indio, Departamento San Martín, Chaco, la comisión jurídica del Juzgado N° 2 validó las acusaciones de la fiscal Gladys Acosta y condenó a pena de cárcel a los Berdún; la comunidad calificó el hecho como un acoso judicial de la letrada, pues los hermanos Berdún eran acusados de desobediencia judicial, o sea, se negaban a ser desalojados de sus tierras.
Pasaron ocho días en la cárcel, una multitud agolpada día y noche fuera de la Alcaldía departamental, presionó exigiendo su libertad. El 18 de noviembre los barrotes de hierro del penal sufrieron la presión popular y fueron obligados a abrirse para darles libertad a Sixto y Alcides Berdún.
Las lagrimas de emoción de más de 200 personas fueron regadas a la tierra, de esa forma se ofrendaba la libertad de los Berdún; es el primer triunfo de un pueblo que la noche del martes 17 de noviembre de 2010 logró dar vuelta la dirección del viento.
UN AÑO DE IMPUNIDAD EN TUCUMÁN
El 12 de octubre de 2009, Darío Amín, en ese momento empleado legislativo de Tucumán, y su hermano, Santiago Amín, chofer y empleado de la Gobernación, llegaban hasta una comunidad diaguita “La Tranquera”. Un acierto periodístico del colectivo Prensa Contrapunto y el periódico El Equeco registró el momento en que uno de ellos dispara a quemarropa y le quita la vida a Javier Chocobar y deja con serias heridas a los jóvenes Andrés y Sergio Mamani.
A un año del fatídico hecho, los asesinos gozan de libertad provisional desde el 18 de febrero de 2010 (Darío Amín, y los ex policías Luis Gómez y Eduardo Valdivieso) y aún no se tiene una fecha para el juicio oral. En la edición papel de octubre del año pasado del periódico Contra Punto decía “El 12 de octubre de 2009 llegó en una camioneta al lugar Darío Amín, acompañado de Jorge Valdivieso y Luis Gómez. Sacaron fotos del terreno y mostrando una supuesta orden judicial, se declararon los auténticos dueños, ya que habían comprado el mismo”. La tranquera en donde ocurrió el asesinato, esta a ocho kilómetros de Trancas, en el Chorro, a escasos 100 metros de la casa de Javier Chocobar. En ese momento, estaban allí unas 20 personas de la comunidad de Chuschagasta –entre mujeres, niños y gente mayor-. Por eso, algunos de los comuneros se acercaron a los hombres para pedirles que se retiren, que no podían estar allí”.
La soberbia del empresario y seguro de su impunidad, motiva a la indigna policía, representada en terreno por Gómez (el que inició los disparos), a abrir fuego sobre las personas, ahí cae muerto Javier Chocobar.
El expediente de este hecho de sangre se encuentra en la Cámara de Apelaciones de Tucumán donde los encargados de llevar las causas eran el Juez Alfonso Zottoli a pedido del fiscal Adolfo Suasnábar, en la ocasión los imputados fueron condenados a prisión preventiva (Amin y Gómez).
Una vez que los asesinos logran su libertad y la apelación de los defensores de los ciudadanos diaguitas, la causa es tomada por Emma Lidia De Nucci, a cargo del Juzgado de Instrucción de II Nominación, quién ya recibió el pedido del Fiscal Suasnábar de elevación a juicio oral. “Su único propósito era acabar con la vida de los indígenas que se interpusieran en el dominio de dichas tierras”, concluyó el fiscal en su requerimiento, argumentando además que la riña no existió.
Con un simbolismo irónico y terrible, Javier Chocobar fue asesinado un 12 de octubre, fecha que remite a los pueblos originarios a repudiar el genocidio llevado a cabo desde la colonización del continente.
GARROTAZOS AL DIÁLOGO SANTIAGUEÑO
El Movimiento Campesino de Santiago del Estero (Mocase), establece un campamento desde el 17 de octubre de 2010 a un costado de la ruta 34 a unos 15 km de la gobernación provincial. El objetivo: comprometer al gobernador Gerardo Zamora a tomar medidas en situaciones de conflictos con los empresarios usurpadores de las tierras que se intensifican en los últimos días sobre tierras comunitarias.
Aquella presión popular hizo que el gobernador Gerardo Zamora los recibiera en audiencia el miércoles 23 de noviembre de 2010. Fueron cuatro largas horas que los voceros elegidos en asambleas estuvieron en el despacho del jefe provincial, afuera los esperaba una multitud que acompañaba a los campesinos en al exigencia de justicia.
Cerca de la medianoche, los voceros del Mocase sin entusiasmo bajaron del edificio a encontrase con los manifestantes que se agolpaban al pie de la estatua del libertador San Martín, sobre la plaza. El entusiasmo del triunfo mantenía a campesinos rurales y residentes en la ciudad expectantes, “no hubo respuestas concretas, si algunas propuestas que las tendremos que trabajar en el campamento de Vilmer”, dijo Guido Corbalán, Presidente del Mocase, al mismo tiempo indicaba que “el campamento sigue en ese lugar”.
No habían pasado ni 72 horas cuando maleantes contratados por el empresario cordobés Lucio Buffa había invadido junto a hombres armados la comunidad de “El Simbolar” (Alberdi) con la intención de usurpar un territorio de 18 mil hectáreas donde, desde siempre, han residido familias de los parajes El Negrito, Villa Palmar y parte de Pozo Limpio.
Ante la agresión, los campesinos se dirigieron a pedirles que salgan del lugar, la respuesta fue negativa e incluso amenazaron con pelear hasta morir ofreciendo sus vidas a favor de un empresario.
El martes 29 de noviembre de 2010, con vehículos, palos, sables y armas de fuego atacaron a los pobladores que se encontraban a un costado de la ruta 2. Como resultado del cobarde ataque, siete campesinos fueron heridos (Gustavo Palavecino, Sergio Serrano, Carlos Suarez, Gabriel, René, Oscar y Walter Barreira), los hechos fueron denunciados pero a la fecha no existen detenidos y tampoco el gobernador se ha pronunciado al respecto. Es más, el Nuevo Diario de propiedad del político José María Cantos en su edición del miércoles 01 de diciembre de 2010 publicó el hecho resaltando que la agresión fue de los campesinos hacia los trabajadores. Para salvar el honor de la prensa local, los campesinos quisieron hacer uso de su derecho a réplica, desmintiendo la publicación, así se lo hicieron saber los periodista del medio (Nuevo Diario), pero la sorpresa fue que el diario, lejos de publicar la versión de los campesinos, aclaró solo la situación de los agredidos pero prosiguió su postura empresarial diciendo “las tierras son de propiedad mancomunada entre los lugareños y el residente de la provincia de Córdoba” (Nuevo diario, viernes 03 de diciembre de 2010. Pág. 42).
Los pueblos originarios del Norte Argentino no pueden zafarse de una historia de más de 500 años de crimen organizado. Los muertos, apresados y heridos descrito en este reportaje, pasan a formar parte de los más de 50 millones de indígenas asesinados desde la colonización española, sus tierras continúan en la mira de la codiciada capitalista que envía sus emisarios (los empresarios) dotados con los elementos necesarios para comprar conciencias, usar la fuerza y como si esto fuera poco, cuentan con el amparo político y judicial para arrasar con las comunidades y romper la estructura natural del monte chaqueño.
Por Pedro Herrera
Director El Coyuyo
Foto: Lavaca.org
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