viernes, 19 de agosto de 2011

Argentina: Los restos estaban a 150 metros de donde se alojaba a los secuestrados

Hallazgo. Expertos trabajan sobre los restos óseos desenterrados en Campo la Ribera (Martín Baez/LaVoz).

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La fiscal Abad dijo que uno de los restos humanos desenterrados en Campo la Ribera corresponde a una "mujer joven". Las pericias determinarán si se trata de víctimas de la dictadura militar
 por Carlos Paillet
La fiscal provincial Adriana Abad reveló ayer a este diario que uno de los restos humanos encontrados el miércoles en el ex centro clandestino de detención de Campo la Ribera, pertenece a una “mujer joven”. En tanto, otra fuente confió que el hallazgo se produjo a “unos 150 metros” de donde funcionaba la “cuadra” de la prisión militar que operó durante la dictadura en esa zona, ubicada al este de la ciudad de Córdoba.

Hasta que se determine si los restos óseos corresponden, o no, a personas asesinadas en esa cárcel ilegal, la investigación estará a cargo de la fiscal de Instrucción Adriana Abad, del Distrito 2 Turno 1.
La funcionaria comentó que, en caso de que los análisis prueben que se trata de víctimas de la dictadura, el expediente será girado a la Justicia Federal; es decir, al Juzgado N° 3, a cargo de Alejandro Sánchez Freytes desde que se jubiló la jueza Cristina Garzón de Lascano.
“Es muy incipiente por ahora, pero hemos tomado intervención porque hay una cuestión de sensibilidad pública y prioritaria, dada las circunstancias, y por la cercanía del lugar con el ex centro de detención clandestino. Indudablemente que había que tomar todos los recaudos necesarios para preservar el lugar y lo que se ha encontrado”, dijo Abad a La Voz del Interior.
Los análisis de los huesos están a cargo del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), cuya delegación en Córdoba tiene como titular a Anahí Ginarte. La experta se negó ayer a dar información sobre la marcha de las investigaciones.
Sin embargo, la fiscal Abad confirmó que se trata de restos de “dos cuerpos”, uno perteneciente “a una mujer joven” (se dijo de alrededor de 25 años) y otro cuya edad aproximada no se ha logrado determinar todavía.
Más restos sueltos. Otro dato saliente que brindó la funcionaria de la Justicia Provincial da cuenta de que en ambos casos aún no se ha podido encontrar rastros que indiquen las causas de los decesos. Tampoco, si hubo “violencia directa” u “orificios” de bala.
“Después se han encontrado otros restos sueltos, en otra parte (de la misma zona), por lo que se está ampliado el radio de búsqueda y trabajando despacio porque el hallazgo ha sido producto de la excavación que se hizo con una pala mecánica”, agregó la fiscal.
Mientras tanto, una fuente de la investigación ligada a los organismos de derechos humanos confió que los restos descubiertos el miércoles de manera accidental por unos obreros, estaban enterrados “a 150 metros” de donde funcionaba la “cuadra” de la cárcel militar de Campo la Ribera, que fue abierta a fines de 1975; es decir, antes del golpe de marzo de 1976.
Esto alimenta la presunción de que podría tratarse de restos de víctimas de la represión, aunque desde la Fiscalía y el EAAF se manejan con cautela sobre el estudio pericial.
Un área crítica. “Lo que hay que determinar es el área enterramientos. Da toda la impresión que si se sigue excavando se podrían encontrar más restos”, dijo la fuente.
De manera coincidente con el hecho producido el miércoles, el Equipo de Antropología Forense ya venía haciendo inspecciones en terrenos de La Ribera ubicados a unos 600 metros del hallazgo. Estas excavaciones obedecieron a testimonios en la Justicia de sobrevivientes de ese centro de cautiverio, donde, se ha probado, se torturaba y asesinaba a detenidos.
“No se encontró en ese lugar donde estaba excavando el Equipo de Antropología, pero sí en este lugar donde estaban trabajando las máquinas motoniveladoras para hacer las cloacas de las casas que se están construyendo” en la zona, añadió.
Distintos testimonios han focalizado en ese predio para señalar que los represores ordenaban “fusilamientos” y enterramientos clandestinos. Esto quedó reflejado en el informe “El horror está enterrado en San Vicente”, un especial multimedia de La Voz del Interior.
En la Justicia provincial
Causa. La investigación por el hallazgo de restos humanos cerca del ex centro clandestino de detención de Campo la Ribera está a cargo de la fiscal de Instrucción Adriana Abad (foto).
Pericias. La fiscal dijo que si se probara que los restos óseos pertenecen a víctimas de la dictadura militar que estuvieron cautivas en ese centro, el expediente será girado a la Justicia Federal.
Juez. El juez Alejandro Sánchez Freytes tomaría entonces el caso, ya que está al frente de la investigación por delitos de violación a los derechos humanos durante la pasada dictadura.

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