El presidente Evo Morales firmó un decreto para facilitar la canalización de recursos de la comunidad internacional y la ayuda humanitaria
El Gobierno de Bolivia, Evo Morales, declaró ayer emergencia nacional mediante un decreto supremo para facilitar la canalización de recursos de la comunidad internacional y la ayuda humanitaria a más de 20.000 familias que están afectadas por los desastres naturales en varias regiones del territorio boliviano.
El anuncio fue dado a conocer mediante un comunicado de Palacio de Gobierno y refrendado por el ministro de Defensa, Rubén Saavedra.
La declaratoria se da horas después de un derrumbe en la ciudad de La Paz que destruyó a 72 viviendas y dejó 118 familias damnificadas.
Las lluvias de las últimas semanas erosionaron el área donde estaban asentadas las casas, según se reportó. La mayor parte del territorio de Bolivia sufre desde diciembre pasado lluvias de diversa índole que han ocasionado desbordes de ríos y la consecuente inundación de áreas como las de los departamentos de Cochabamba (centro), Santa Cruz (este), Beni y Pando (norte).
El Viceministerio de Defensa Civil ha informado que hasta el pasado martes se tenían contabilizadas a 22.000 familias afectadas y 11 muertos por las inclemencias del tiempo que según especialistas se debe al fenómeno climatológico de El Niño.
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