Sao Paulo, 27 ene (EFE).-
El reconocimiento de Brasil al nuevo Gobierno de Honduras, presidido por Porfirio Lobo, dependerá del tratamiento que reciban el ex mandatario Manuel Zelaya y sus seguidores, dijo hoy el ministro brasileño de Relaciones Exteriores, Celso Amorim.
Desde Ginebra, donde participa en la reunión extraordinaria del Consejo de Derechos Humanos de la ONU dedicado a Haití, el canciller brasileño afirmó que todo depende de cómo "Zelaya y las corrientes que representa son tratadas en el futuro", según cita la Agencia Brasil (oficial).
Sin embargo, Amorim quiso enfatizar que "el problema no es reconocer o no al Gobierno (de Porfirio Lobo). El problema es el tipo de relación que se va a querer mantener".
Brasil no mantiene relaciones con Honduras desde el golpe que el pasado mes de junio sufrió el entonces presidente, Manuel Zelaya, y, al igual que buena parte de la comunidad internacional, tampoco reconoce las elecciones que ganó Lobo el pasado 29 de noviembre.
Lobo, próspero empresario, fue investido hoy como presidente hondureño después de la profunda crisis política que se desató en su país con el golpe de Estado que derrocó a Zelaya y puso en el poder a Roberto Micheletti.
Zelaya, que desde el pasado 21 de septiembre estaba alojado en la embajada de Brasil en Tegucigalpa, tras regresar clandestinamente al país, abandonó hoy esa misión diplomática y tomó un avión rumbo a República Dominicana.
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