Amarga derrota para el Frente; aire para Mujica

Mujica es como el camelon, cambia de careta según la ocación

La amarga derrota sufrida en la madrugada de este viernes por el Frente Amplio como consecuencia del rechazo de uno de sus diputados a votar la anulación de la ley de amnistía a los militares expuso la fragilidad de la mayoría parlamentaria oficialista y encontró a la coalición en un pantano de contradicciones, confusiones constitucionales y sin dirección.

Pero como en un cuadro de Escher, donde la perspectiva imposible confunde las dimensiones arriba y abajo, las paradojas aguardan al Frente Amplio en cada esquina. El diputado disidente Víctor Semproni se transformó en el eje de rotación para una izquierda en posición de girar y alinearse con el golpeado liderazgo del presidente José Mujica.
Frustrada la anulación de la ley de Caducidad por un empate entre el oficialismo y la oposición en Diputados, ahora queda en pie la propuesta presidencial de su derogación, combinada con la eliminación administrativa de los decretos que permitieron el archivo de causas por pasados delitos de lesa humanidad.
Resulta que el mismo legislador que quebró la unidad parlamentaria y frustró a la mayoría de sus compañeros, ahora obliga al FA a revisar el desplante del Plenario hacia el planteo del mandatario.
A pesar de sus marchas y contramarchas el mandatario podría recuperar oxígeno y retomar su papel de guía por un camino sin objeciones legales. Incluso está en condiciones de encontrar aliados en el Partido Nacional, donde muchos dirigentes adhirieron al voto verde en 1989.
Desde el punto de vista jurídico el centro de la cuestión es que en noviembre prescriben los delitos que los familiares de las víctimas quieren juzgar. El camino de Mujica, afincado en una tesis jurídica del constitucionalista Martín Risso, evita las objeciones constitucionales y otorga un margen para la actuación de la Justicia hasta noviembre, aunque la izquierda está empecinada en prorrogar ese plazo.
También es cierto que, con la ley vigente, es posible derogar los decretos y desarchivar actuaciones, así como juzgar a los que el gobierno entienda pertinente. Pero es claro que la resignación no está en los planes del Frente Amplio, que ahora está obligado a regresar al punto de partida y volver a empezar con unos cuantos machucones en la espalda.
Lo que viene
Es claro también que el Partido Comunista y otros sectores pretenden insistir en caminos legales para crear nuevas figuras penales, pero esas propuestas difícilmente consigan consenso en plazos reducidos para favorecer los juicios. Este jueves la presión ejercida por la bancada contra Semproni fue tremenda, pero el legislador se mantuvo firme.

Luego del resultado, el asunto de la ley de Caducidad volverá al seno de la coalición de izquierda, donde se explorarán caminos para atacar la ley. Es allí donde cobra fuerza la fórmula de Mujica, que antes había sido fogoneada por el vicepresidente Danilo Astori sin éxito.
El secretario político del Partido Comunista, Daniel Marsiglia, dijo a
El Observador que “más allá de los vaivenes parlamentarios este tema lo tiene que definir la fuerza política”.
Consultado sobre la posibilidad de volver a considerar la derogación de la ley declaró: “Recién se está terminando una etapa y no vamos a salir a las apuradas a resolver el tema en caso de que no se anule la ley”. Dijo que el Frente Amplio se tomará su tiempo. Añadió que “está todo sobre la mesa” y subrayó que “cada momento tiene su propia dinámica y sus propias soluciones”.
El diputado Óscar Grobba (Espacio 609) también manejó la posibilidad de volver a plantear la propuesta presidencial en caso de que no se anulara anoche la ley, un sentimiento compartido en Asamblea Uruguay, el MPP y otros sectores del Frente Amplio.
Durante el debate el diputado suplente de la Corriente de Acción y Pensamiento-Libertad (CAP-L), Julio Balmelli, dijo que votaba por disciplina partidaria. El legislador anunció que su sector, fuera cual fuera la resolución, “se compromete a seguir buscando caminos para la verdad y la Justicia”.
El rechazo a la anulación a la postre respaldó la posición de Mujica, anunciada junto a Astori a los diputados de su partido en el Parlamento. Esa intervención del presidente fue explotada al máximo este jueves por la oposición. “Estamos acompañados del presidente de la República, al que su partido abandonó”, dijo el diputado Jorge Gandini (Alianza Nacional). El legislador puso el dedo en la llaga y dijo que las argumentaciones que escuchó este jueves por parte de la izquierda fueron “en respuesta” al presidente. “Mujica perdió en este tema trascendental el respaldo de su partido político”, sostuvo.
Antes de retirarse de sala a la hora 4.20 el diputado Víctor Semproni ratificó su postura contraria al proyecto por considerarlo “un camino equivocado”.
“Con dolor, no vamos a aceptar la disciplina partidaria porque este tema se ha convertido en un asunto de conciencia”, dijo Semproni y adelantó que seguirá luchando por “verdad y justicia”.