Uruguay y sus "agradecimientos", ahora es Enrique Iglesias, es presidente del BID

La mayoría de las veces que asomo mi cabeza a la "ventana virtual" de la llamada información oficial del país un escalofrío recorre mi cuerpo, la indignación sube aceleradamente y la bronca enrojece mi rostro.
Uruguay y el BID rinden emotivo homenaje a Enrique Iglesias, secretario del Segib, así el titular de Infolatam.

El tan mentado 'uruguayo' que no lo es tanto, ya que nació en la 'madre patria', Asturias, hijo de exiliados, que entre 1964 y 1967 fue miembro de la Asociación Latinoamericana de Libre Comercio (ALALC) y de la Alianza para el Progreso, ('si eso, alianza para el progreso', agosto 1961 Punta del Este). En 1967 fue nombrado presidente del Banco Central de Uruguay nada más ni nada menos que bajo el gobierno de Jorge Pacheco Areco, cargo que abandonó un año después para convertirse en asesor del BID, desde donde participó en la aplicación de los programas de Naciones Unidas (ONU) para el Desarrollo de América Latina.
En 1970 fue desempeñó como asesor del gobierno venezolano en cuestiones de planificación. Desde 1972, secretario general de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPALC). Fundador del Foro del Tercer Mundo en 1973, galardonado con el Premio Asturias por su contribución al desarrollo de América Latina (1982). En 1986 pasa a ocupar la cartera de Asuntos Exteriores en el gobierno de Julio María Sanguinetti.
En el año 2000, en Brasilia, como presidente del BID, presenta el programa IIRSA, de 'integración regional, programa que Uruguay, su progresismo cumple al pie de la letra. Pero, anteriormente, en el 2004, lugo del triunfo electoral del Frente Amplio, el elegido 'presidente de todos los uruguayos' , el de 'ha nacido una esperanza', Tabaré Vázquez, viaja a Estados Unidos para proponerle el cargo de Ministro de Economía, y rechazó.
"Me siento halagado, pero sé que soy más útil al país en mi cargo actual", fue la respuesta.
No se equivocó Iglesias.
En el 2003, el entonces Secretario General de la ONU, Kofi Annan, lo nombró miembro de la Alta Comsión de Alto Nivel para evaluar las amenazas a 'paz y la seguridad mundial'.
En el homenaje fue destacado por "su independencia de criterio y su coraje".
Astori dijo: "Enrique es un superador de distancias y creador de cercanías, los uruguayos sentimos un sano orgullo al reconocerlo como compatriotas suyos". 
El actual presidente del BID, Luis Alberto Moreno afirmó que el homenajeado "representa la cara de Ibero América y el corazón de Uruguay".
Sin duda alguna, Enrique Iglesias, no por uruguayo, representa la cara del gobierno progresista del Frente Amplio, que ya no le quedan máscaras, como fiel y sevil representante del neoliberalismo, el capitalismo, y de la entrega de la soberanía del país a manos de las multinacionales.
Lidia Amelia