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Las bases del partido de Rafael Correa defendieron la presencia de Hilary Clinton y cargaron contra movimientos de la izquierda ecuatoriana.La visita de Hilary Clinton en Ecuador causó rechazo por parte de movimientos izquierdistas contrarios al gobierno
La Federación de Estudiantes de Ecuador (FEUE), cuyo presidente se encuentra en prisión, y el Movimiento Popular Democrático (MPD) marcharon hasta la “Plaza de la Independencia” para protestar por la visita de la funcionaria norteamericana.
Los manifestantes de los grupos antiimperialistas fueron recibidos por las bases del Presidente Correa que asistieron para apoyar la presencia de Clinton. Un ejemplo de esto fue Eugenia Ayoví quien manifestó a la prensa estatal: “…la presencia de los miembros del MPD solamente da mala imagen del Ecuador, puesto que con este Gobierno el patriotismo se ha levantado…”, “Que vengan estos señores a gritar cosas sin sentido, no hacen otra cosa que manchar todo lo bueno que el presidente Rafael Correa está haciendo en beneficio de los más necesitados”.
Otros ciudadanos afines a Correa afirmaron: “no saben qué mismo es lo que quieren, ellos no hacen nada en función de patria, primero se quejaban porque el Presidente supuestamente no tenía acercamientos con los Estados Unidos y ahora que se reúne con una alta funcionaria de ese país, se quejan porque se ha reunido, nadie los entiende”.
Aunque según las bases de Correa el discurso de la izquierda es ambiguo, no existen datos que indiquen que el MPD y la FEUE pidieran en ningún momento un acercamiento a los Estados Unidos, al contrario que en los grupos de la derecha ecuatoriana y la prensa conservadora del país que desde hace tiempo reclaman este acercamiento, según ellos para recuperar el espacio de la derecha que se encontraba en peligro en la primera etapa del Gobierno.
Temas a tratar con Clinton
Los temas que Correa tratará con Clinton son variados y van desde la inclusión de Ecuador en la lista de “la GAFI”, la migración y el tema de seguridad regional, entre otros. Sin embargo sectores de izquierda del país dudan que no exista una agenda oculta en la visita de la alta funcionaria.
Dimitri Cevallos / LibreRed.net
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