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| La reforma migratoria y el freno a las deportaciones |
En un acto de desobediencia civil, una de las entradas del edificio federal fue bloqueada por los manifestantes, quienes arengaban a más de un centenar de participantes con consignas de “alto a las deportaciones” y “dinero para empleos y educación, no para deportaciones”.
La protesta fue reprimida por agentes de la policía de Chicago, que arrestaron a cuatro participantes, entre ellos, al reverendo José Landaverde, de la Misión Católica Anglicana Nuestra Señora de Guadalupe; y a Emma Lozano, directora del Centro sin Fronteras.
Landaverde, quien marchó al frente de los manifestantes antes de ser arrestado, comentó que el gobierno federal deporta a personas que no tienen récord criminal, que han vivido en el país por muchos años y que tienen hijos que son ciudadanos estadounidenses.
“Los fiscales no aplican la discreción judicial y los jueces están deportando indiscriminadamente”, subrayó el reverendo anglicano.
Por su parte, el activista Artemio Arreola, de la Coalición de Illinois pro Derechos de Inmigrantes y Refugiados, declaró a medios locales de difusión que se seguirán levantando voces para que la administración del presidente Barack Obama frene las deportaciones.
“Que detenga el sufrimiento de nuestras familias. En este lugar, se siguen separando familias diariamente y queremos decirle al presidente Obama que cumpla sus promesas”, enfatizó Arreola.
Esta manifestación fue parte de las movilizaciones de los “indignados”, que protestan contra la Cumbre de la Organización del Atlántico Norte (OTAN), a celebrarse del 20 y 21 de mayo en Chicago. En esta ocasión y por primera vez en su historia, la reunión cumbre del pacto militar se llevará a cabo en otra ciudad estadounidense que no sea la capital, Washington, D.C.
Fuente; PL
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