Aquella Marcha Verde de 1975 fue idea de Henry Kissinger

MARRUECOS IMPIDE EL DERECHO SAHARUI DE AUTODETERMINACION

Aquella Marcha Verde que los marroquies realizaron en 1975 para invadir las posiciones españolas del Sahara Occidental está considerada en la propaganda alauita como una genial iniciativa del rey Hassan II, pero eso es mentira y esconde que fue idea de Henry Kissinger, ministro estadounidense de Asuntos Exteriores.

1975 habia comenzado muy mal para los intereses norteamericanos en varios lugares del mundo y todos los funcionarios de los Estados Unidos trabajaban a destajo para afianzar el capitalismo y detener la imparable expansión prosoviética. Los comunistas de Vietnam tomaron Saigón el 30 de Abril, Marruecos sufría una crisis interna que asustaba al propio monarca alauita, la revolución portuguesa giraba a la izquierda, el Frelimo puso gobierno en Mozambique y los militares españoles de la UMD hacían ver en Washington que Marrecos y la Península Ibérica necesitaban urgentes medidas.

Todos los agentes de la CIA que Estados Unidos retiró de Vietnam pasaron a reforzar el capitalismo en otras naciones y España, Marruecos y la derecha portuguesa recibieron muchos asesores y grandes cantidades de dinero, armas, municiones, herramientas, equipos electrónicos, material industrial, maquinaria pesada y vehiculos de diversa capacidad. Esos expertos de la CIA vieron entre las autoridades españolas y marroquies ansias de riqueza y dos grandes debilidades ideológicas y con ellas y sobre ellas idearon un plan para que el Sahara Occidental pasara a poder de los marroquies burlando el referendúm de autodeterminación que exigía la ONU.

Estados Unidos sabía que la Unión Soviética descuidaría de manera temporal algunas zonas para fortalecerse en Indochina y después de que el presidente norteamericano, Gerald Ford, visitara Madrid el 31 de Mayo, solo estaba en su contra el caudillo de España. Franco le dijo a Gerald Ford que España no le regalaba sus posiciones del Sahara a nadie, y mucho menos al rey de Marruecos, que de vez en cuando atentaba criminalmente contra los soldados españoles.

Kissinger llegó entonces a la conclusión de que Franco estorbaba en los planes imperialistas de los Estados Unidos y sabiendo que esos gringos hacen lo que sea para conseguir sus objetivos no es de extrañar que tuvieran algo que ver en el empeoramiento de salud que el caudillo experimentó los últimos 50 dias de su vida.

Los norteamericanos diseñaron aquella marcha de marroquies entre Junio y Julio de 1975, pues en sus papeles secretos aparece con el nombre de marcha blanca, porque se inspiraron en la marcha de la sal que Ghandi inició el 12 de marzo de 1930 contra los británicos que dominaban la India, y en su organización participaron todos los agentes que la CIA tenía entonces en Madrid, Rabat, París, Lisboa, Mauritania y Arabia Saudita.

El dinero para pagar los gastos de la marcha los puso Arabia Saudita, Henry Kissinger le dió el visto bueno cuando visitaba Jerusalén el dia 21 de Agosto y Hassan II y su gobierno solo pusieron la gente, la intendencia de la marcha y la propaganda oficial.

Un agente especial de Washington, con categoría de General, le dijo al rey de Marruecos que anunciara públicamente la necesidad de aquella marchar sobre el sahara y dicho monarca la convocó el 16 de octubre, una vez que conoció el informe que sobre el tema saharaui había dado el Tribunal Internacional de Justicia.

Franco cayó gravemente enfermo el 18 de octubre, el ministro Jose Solís Ruiz visitó al rey Hassan II el 20 de octubre, Arias Navarro se entrevista con el ministro marroquí de asuntos exteriores el 24 de octubre y Juan Carlos asumió la Jefatura de Estado el dia 30.

Con Franco muriéndose en la cama y seguros ya de que Arias Navarro y Juan Carlos obedecían a los norteamericanos, aquellos agentes de la CIA le dijeron al rey de Marruecos que la marcha debía hacerse antes de que el caudillo de España mudiera mejorar, y que todo iba a salir bien si cada cual hacía lo convenido.

La gente de Marruecos salió para tierra saharaui el 6 de noviembre y lo convenido era claro y sencillo: La Marcha Verde sería leída y vista en toda la prensa capitalismo del mundo, para que pareciera un pequeño conflicto entre musulmanes, España haría lo mínimo en contra de los caminantes, para que dias después cediera toda la administración del Sahara Occidental, y Francia y los Estados Unidos garantizarían el éxito ante los organismos de la ONU.

A esa marcha se la llamó verde porque ese es el color del paraiso islámico y aquellos hombres y mujeres estaban tan manipulados por la monarquía alauita que los presos obtenían la libertad si solo se sumaban a élla y a todas las familias que quisieran residir en la nueva tierra conquistada les prometieron una vivienda y medios para vivir mejor que en sus lugares de procedencia. La gente de la marcha debería ser muy numerosa, para con ella poder modificar el censo electoral los españoles habían elaborado en 1974, y la falta de viviendas sería suplida robándole a los saharauis las suyas.

Esa Marcha Verde fue una maniobra para burlar la ley internacional de descolonización y toda vez que ya sabemos que los gastos de la operación MINURSO superan los 12.000 millones de dólares, la ONU debería castigar a España, Estados Unidos y Marruecos por engañar al mundo, por robar las riquezas naturales del Sahara Occidental y por oprimir y reprimir a los saharauis. He dicho.

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